Poesía – Icono Editorial

EL TIEMPO TORCIDO

Icono Editorial — Wed, 25 Oct 2023 14:35:18 +0000

«La prosa me arrastró con una fuerza vertiginosa inaudita y me envolvió con sus ráfagas de extraña poesía: extraña y hermosa. El texto me sacudió más de una vez. Hay momentos tremendos, más allá de la nostalgia, momentos trágicos, que conmueven, que estremecen; percibo una estructura musical con temas que vuelan pero que regresan en sorpresivos “ritornelos”. También percibo algo pictórico como si texto se hiciera pictórico, no por alguna cualidad descriptiva, sino por su “estructura”».

—ENRIQUE PULECIO MARIÑO

SIEMPRE ES SALUDABLE PERDER SANGRE

Icono Editorial — Mon, 11 Jul 2022 22:23:17 +0000

«Siempre es saludable perder sangre. Es saludable sentirse débil bajo el cielo azul, es saludable sentirse enfermo bajo el viento limpio de la mañana. Es saludable que una bala te rompa una arteria importante en una noche de lluvia a la salida de un bar».

En 1995, la temprana muerte de Rafael Chaparro Madiedo convirtió su novela Opio en las nubes en una obra de culto de la literatura underground colombiana y en una referencia clave para muchos jóvenes de Latinoamérica.

Chaparro también cultivó el cuento con maestría y desesperación. Los personajes de Siempre es saludable perder sangre nadan en las podridas aguas del amor y de los días, entre palomas grises y tristes de París y van a cines de Nueva York acompañados de mujeres solas con labial rojo. Chaparro nos regala trece historias llenas de vida, de esas que te incitan a rodar ebrio de bar en bar, de labio en labio, de cigarrillo en cigarrillo, de pesadilla en pesadilla; lejos de lo correcto, lejos de las buenas costumbres.

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«Las drogas y la música son otras formas de viaje para Chaparro, un escritor que se sumergió en la ciudad para revelar la luz que existe en sus calles y bares penumbrosos. Toca descubrirlo». (Edmundo Paz-Soldán)

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«El Joyce del trópico». (J. S. De Montfort)

TODO A MEDIA LUZ

Icono Editorial — Fri, 07 May 2021 01:43:27 +0000

Es una magistral semblanza, con novedoso enfoque humanístico, de nuestra problemática social, claramente autobiográfica, porque sólo así es posible tratar con tanta suficiencia el drama de una sociedad que ha perdido los valores que alguna vez la hicieron grande y digna. La casuística de su autor como notable jurista también brilla en el texto. De su encantadora narrativa, plena de vida y calor humano, aflora espontáneamente el humanismo, fino y profundo, de elevadas resonancias espirituales, exclusivo de las grandes obras que han tratado con sabiduría la naturaleza bifaz de la tragedia humana. —Ricardo Aguirre M. * * * El lector encontrará una síntesis de la época de la violencia partidista que le permitirá una mejor comprensión de los hechos sociales y políticos que actualmente aquejan a nuestra sociedad. Es pues esta una invitación a profundizar desde la literatura en las causas sociales, económicas y políticas de la actual situación por la que atraviesa nuestro país, que puede servir como fundamento para adoptar posiciones que permitan superar la crisis que padece la sociedad colombiana, dándole así realidad al viejo brocardo de Cicerón conforme al cual «la historia es la maestra de la vida». —Alfredo Beltrán Sierra

EL GUERRERO Y EL ÁRBOL

Icono Editorial — Mon, 16 Sep 2019 04:39:33 +0000

«Me hice poeta de la mano de dos poetas mayores: el madrileño José García Nieto y el bogotano Eduardo Carranza, quienes me despertaron y apoyaron cuando yo apenas hacía versos adolescentes en Ávila, que es la ciudad-madre de mi provincia. Hay también otro poeta, el más grande, Antonio Machado. Él me fue llevando de la mano desde que nos conocimos al final de la primaria. Y resulta que mi maestro cerraba su enseñanza por vacaciones poniéndonos a recitar poemas, rodeados de familiares. El que escogió para “mi recitación” fue un trocito de Orillas del Duero. La recitación iba bien hasta que llegué al «yo voy cantado, viajero / a lo largo del sendero» y en lugar de seguir “la tarde cayendo está”, yo cociné “suena el río en los álamos del viento”. Rompí a llorar, pero el maestro me consoló diciéndome: “¡Tranquilo, Jesús, que Machado te hubiera agradecido la variación!”. Ojalá que la lectura de mis poemas deje a los lectores resonando en sus oídos la urgente invitación a soñar, o sea, a reinventar el mundo y la vida».

LA CASA MÁS GRANDE DEL MUNDO

Icono Editorial — Fri, 26 Apr 2019 22:55:00 +0000

«He leído poetas negros y encuentro en ellos la gran virtud de la sonoridad. De la autenticidad. Ese hálito de palmeras, brisa, susurros y cánticos, también está dentro de esa casa grande donde se canta, se bebe y se come en corro.» »Todo el palafito —de madera— es la historia del río, del mar, de los negros que viven y sobreviven con el paisaje y los ancestros. Hay un ritmo que viene con el sonido secreto de la madera y que Liz desentraña y vuelve poema. La voz va hasta Sierra Leona, viaja en la cadencia de quienes ahora abren el espejo y el libro de un relato lleno de amaneceres de luna. »Existe una ruptura del canto tradicional de los versos de los negros, esa música de Nicolás Guillén que ahora se retoma para dar testimonio y sonoridad al verso. (…) »La casa más grande del mundo, bello poema con tono de infancia, con voz de lo mágico que no hemos perdido porque todos hemos querido una casa así, un país así, una familia así, feliz y resucitada. Poemas esenciales, vida, muerte, vejez y sueños. La intimidad y el recorrido por la vida cotidiana también están presentes, el vestido, el vino, el jazz, la poesía, un poco de humor y mucha armonía, así anuncie —como siempre lo hace el poema— la derrota de los hombres». —JORGE ELIÉCER PARDO

PERDER EL TIEMPO

Icono Editorial — Fri, 26 Apr 2019 22:08:48 +0000

Eduardo Camacho Guizado (Tunja, 1937 – Córdoba, 2019) obtuvo su licenciatura en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de los Andes. Muy joven, se trasladó a Madrid, donde fue uno de los doctorandos de Dámaso Alonso en la Universidad Complutense. En 1962 presentó su tesis doctoral sobre La elegía funeral en la poesía española, investigación que fue publicada por la editorial Gredos en 1969 y reeditada en Bogotá en 2009. Su actividad docente fue dilatada y apasionante: enseñó literatura y lingüística durante diez años en Colombia, tanto en la Universidad de los Andes como en el prestigioso Instituto Caro y Cuervo. Sus estancias profesionales en Estados Unidos se desarrollaron en la Spanish Summer School de Middlebury College y en la State University of New York (Albany). A mediados de los setenta volvió a Madrid como profesor y luego director del Programa de Middlebury College, el más antiguo de los programas educativos de intercambio con Estados Unidos en España.

Antes de la publicación de su tesis, Eduardo Camacho nos ofreció en 1967 sus Estudios sobre literatura colombiana: siglos XVI y XVII y una monografía sobre el más importante poeta del modernismo colombiano, La poesía de José Asunción Silva (1968). De este autor publicó su Obra completa en Caracas en 1977, bajo el sello de la canónica Biblioteca Ayacucho.

Atento a todos los intereses intelectuales y comprometido con la sociedad de su tiempo, Camacho Guizado se atrevió a encarar a uno de los autores más prolíficos y versátiles de la literatura hispanoamericana, al que dedicó el estudio Neruda. Naturaleza, historia, poética (Madrid, 1973), que sería reeditado en Bogotá en 2010.

También se dedicó a la escritura de novelas, de las que nos ha dejado tres títulos: Sobre la raya (1985), Aquellos rojos años (1990) y Los cuadernos de Souto (1996). Y en febrero de 2018 la Universidad de los Andes publicó Textos mínimos, una colección de haikus ilustrada por Marcos Roda.

#TELEO

LE CORPS D’ELLE

Icono Editorial — Tue, 26 Mar 2019 23:02:27 +0000

#Teleo

E-book

Audiolibro

¡Cómo imaginar que era necesario el paso al tercer milenio para ver por fin traducido al francés uno de los más grandes poetas colombianos! Porque con El cuerpo de ella, cántico de cánticos erótico y moderno concebido en los años sesenta, la poesía se enriquece hoy con una maravillosa odisea destinada a santificar el amor y la carne. ¿Quién alguna vez no ha deseado pintar y cantar el cuerpo del ser amado? Todo enamorado se reconocerá en estos poemas de una sensualidad y simplicidad casi sensoriales. Portaestandarte gigoló del movimiento poético nadaísta, Jotamario Arbeláez da a la poesía contemporánea los medios para finalmente alcanzar el orgasmo que ella tanto necesitaba.

LOS ESCOMBROS DE LOS SUEÑOS

Icono Editorial — Sun, 17 Mar 2019 01:19:29 +0000

JOAQUÍN MATTOS OMAR «Es curioso que en una ciudad tan abierta al mundo como Barranquilla (…), Joaquín Mattos Omar mantenga con terquedad su apuesta intimista. «De mirada que se recrea primero a sí mismo y a su patio interior, y luego al mundo ancho y ajeno. «(…) Los escombros no serán los cimientos de los nuevos palacios sino servirán apenas para reclinar en ellos una muy larga fatiga. La misma que horadó el Muro de Berlín, la que despeja los alrededores de las Torres Gemelas con espejos de agua, silencio y rezos en voz baja contra la muerte, he aquí la nueva poesía. Este libro, enmarcado entre esas fechas, sostiene su celebración, una vez más, de la vieja poesía, de la renovada poesía (sin teoría y sin poéticas) con la honestidad de quien se debate por una palabra justa y una mirada limpia».

MALAS LENGUAS

Icono Editorial — Sun, 17 Mar 2019 01:19:29 +0000

La poesía ha dado para todo: los hombres de la guerra han masacrado a sus semejantes invocando su nombre, pero también se han abierto las piernas de los amores difíciles y levantado tallos tristes con el apoyo de unos cuantos versos bien dotados. No obstante, la poesía brilla por su ausencia en las editoriales. Son mínimas las grandes empresas que se le miden a publicar poemas porque –dicen al unísono– no se vende. Llenan estadios, van de boca en boca, secan salivas de tanto cantarla, despiertan la memoria, ocupan los renglones de nuestras primeras lecturas de niños… pero lo cierto es que no se venden los libros de poesía. Nadie explica el absurdo. La poesía no vende, tal vez, y precisamente, porque NO SE VENDE. Es íntima, sincera, absolutamente desnuda. Es terca, no cede ante un movimiento literario tan proclive a las leyes de la oferta y la demanda. Henos pues entonces promoviéndola porque la amamos, porque es un acto de amor, porque los poetas existen aunque, como dice Sergio, “las palabras no dan para comprar zapatos”. Ningún poeta aspira a vivir de ellas, y son pocos los que, por un accidente del destino, lo han logrado, sin que éste fuera su propósito.

VOCES ORIGINARIAS DE ABYA YALA

Icono Editorial — Sun, 17 Mar 2019 01:19:28 +0000

Hugo Jamioy «Su sentido poético resalta la labor fecundadora, propagadora e inseminadora del viento y “guardar la esencia del espíritu de los abuelos” es la enseñanza de su ejercicio con la palabra». Fredy Chikangana (Wiñay Mallki) «En su lenguaje habla de la tierra que le fue conferida como le ha sido conferida a cada criatura para ser. Valiéndose de los silencios húmedos de la vida, denuncia la miseria de la historia en el silencio de los ríos, o el humo espeso de la indiferencia…». Miguel Ángel López-Hernández (Vito Apüshana) «Cuando oímos que Vito era pastor de aguas, presentimos la fecundidad de su voz. Y a lo largo de su obra se comprueba, entre otras cosas, por su capacidad de descubrir la leyenda en la vida cotidiana del wayuu».